DIVERSIDAD Y JUEGO
Al momento de querer representarnos a nosotros mismos o a quienes tenemos cerca, ya sea a través de un dibujo o modelando, nos encontramos frente al desafío del polémico y pasado de moda “color piel”. No existe un color “piel” que se adecue universalmente a todas las personas. Existen tantos “colores piel” como personas en el mundo.
En nuestra sociedad e incluso dentro de una misma familia, coexisten variados matices de color de piel, etnias y culturas. Hablar y Jugar con la diversidad construye la base para el entendimiento y el respeto por los otros.
La diversidad NO se limita únicamente al color de la piel o características corporales/físicas, también incluye aspectos importantes que nos diferencian; como prácticas culturales relevantes y/o herencias familiares, por ejemplo.
Hablar sobre diversidad con los niños es buena forma de abordar el tema, pero creemos que existe una mejor: JUGAR Y CREAR.
Edad sugerida: De 5 años en adelante
Modelado con masa
(usamos la receta clásica de cremor tartaro y colorantes vegetales)
La idea es diseñar, crear y modelar personajes que se parezcan a uno mismo y a los amigos que estén cerca. Para poder hacerlo preparamos previamente 6 colores de masa que se asemejen a los colores piel en la realidad. NO tienen que ser perfectos ni exactos, a medida que los niños comiencen a modelar, pueden ir mezclando trocitos de masas de diferente color hasta lograr el tono deseado. Pueden ir probando comparando con la misma piel de quien se quiere representar.
Estos diseños diversos pueden ser utilizados por los chicos para el armado de relatos, una sesión de fotos, para un videomontaje y/o para stop motion.
El juego es la acción con la cual ellos se identifican y da la posibilidad de aprender mediante el accionar lúdico. Mediante el juego con los colores de piel se genera conciencia sobre uno mismo y de los otros.